Las manitas de cerdo son una receta tradicional de muchas gastronomías en diferentes países. En Perú las llaman patitas de chancho, en Venezuela
patitas de cochino. En Estados Unidos son famosas sus manitas de cerdo encurtidas. Hoy vamos a preparar una receta tradicional de la Comunidad Valenciana de la comarca El Alto Mijares, provincia de Castellón. Necesitamos los siguientes ingredientes.
INGREDIENTES
4 manitas de cerdo partidas por la mitad
6 zanahorias
4 cebollas
4 tomates
1 cabeza de ajos
100 g de almendras
2 rebanadas de pan frito
250 ml de vino blanco
2 hojas de laurel
Pimentón dulce
Guindillas opcional
Aceite de oliva
Sal
PROCESO
- En primer lugar limpiamos las manitas y las ponemos a cocer en un olla.
- Se cuecen con agua, sal, dos cebollas cortadas en trozos y 3 zanahorias cortadas, junto con el laurel.
- Si se cuece en la olla exprés es 1 hora de cocción.
- Si se cuece en una olla normal será 1 hora y media de cocción a fuego lento.
- Una vez trascurrido el tiempo se cuelan la manitas y se reserva el caldo.
- En otra cacerola vamos a preparar la salsa.
- Sofreiremos las otras dos cebollas cortadas en trocitos.
- Sofreímos los dientes de ajos sin pelar.
- Una vez dorados los sacamos de la cacerola.
- A continuación añadimos las dos cortadas de pan duro y lo sofreímos hasta que se doren. Los apartamos.
- Ahora añadimos las 3 zanahorias restantes cortadas en trozos.
- Rehogamos bien.
- Una vez sofrita las cebollas, y las zanahorias añadimos los tomates troceados sin pepitas.
- A continuación añadimos el pimentón dulce.
- Incorporamos el vino blanco y dejamos evaporar el alcohol.
- Añadimos caldo de la cocción de las manitas.
- Dejamos que hierba.
- Incorporamos unas guindillas si nos gustan picantes.
- Por otra parte preparamos un majado con el pan que hemos sofrito, los ajos y las almendras.
- Una vez machacadas en el mortero, las añadimos a la salsa.
- Dejamos que hierva y bajamos el fuego a lento. Dejamos cocer 15 min.
- Cuando la salsa ya esta hecha lo único que queda es triturarla con la batidora.
- Probamos de sal.
- Añadimos a continuación las manitas de cerdo.
- Ahora dejamos cocer todo unos 15 min. a fuego lento.
- Una vez pasado el tiempo esto esta listo para servirse bien caliente.
Seguro que os gusta esta receta con una buena copita de vino.
Os dejo el video para que veáis los pasos.
No es una receta que prepare a menudo, pero algunas veces sí porque a mi marido le gustan. Como tu las has preparado quedan muy sabrosas con esa salsita tan buena.
ResponderEliminarUn beso.
Gracias Lola, ya somos dos, yo también las suelo preparar porque a mi marido le encantan, un beset
EliminarHola, qué buena es que se ven, de vez en cuando las preparamos en casa. Gracias por la receta. Un beso.
ResponderEliminarGracias Silvia, yo las preparo en casa de vez en cuando porque le gusta mucho a mi marido. Lo interesante es que las manitas de cerdo es todo gelatina, por lo tanto es una fuente natural de colágeno para nuestras articulaciones, un beset
EliminarQue ricaaaasss!!!!! Me encantan las manitas de cerdo jiji y con un sofrito y una picadita como las has hecho para chuparse los dedos. Yo solia añadirles unos garbanzos por ahi de tropezones jajaja. Ainssss me han entrado ganas de comerlos :P
ResponderEliminarBesote!!!!
Tomo nota y seguro que yo también la pruebo con garbanzos, asi es más completo. Un beset Ayla
EliminarQué ricas, a mí me encantan y no te digo a mi marido. Para chuparse los dedos pues es para disfrutarla con gusto. Un beso!!
ResponderEliminarHola Paloma, has hecho un plato de los que me vuelven loca. Disfruto muchísimo comiendolas, así que con esta estupenda salsa seguro que me chuparia los dedos. Espectacular.
ResponderEliminarHola Paloma,
ResponderEliminarQUé buena pinta tienen esas manitas de cerdo. A mí es una carne que gusta, resulta muy gelatinosa, y esa textura me encantan.
Con esa salsita que le has preparado seguro que estaban para chuparse los dedos.
Un beso, guapa
En casa, mi madre las hacía a menudo, ahora ya casi nunca las hacemos, pero es un plato que tengo en mi memoria como un plato de mi infancia que me encantaba.
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